Amanece, tengo miedo. El viento sopla, le gente se cruza, la tierra gira y gira,… El mundo predecible, impredecible, asusta.
Me visto con la confianza del sastrecillo valiente. Aún sabiendo que la realidad es otra, muy distinta a la que él predicaba: Siete de un golpe, los gigantes me destrozaran por que soy incapaz de matar ni una mosca. Te mataran, has de matar: esa es la consigna.
Al menos, con esos seres enormes, sabes donde apuntar. Aquí los malos son etéreos, que miedo que si disparo es a inocentes y no me ha de importar.
Ratones, arañas, peras, casas, terrorista, estado, amanece….que horror. Necesitan que tenga miedo de los míos y de los otros. Necesitan que no tenga nada que decir y así decidirán mis afirmaciones y mis negaciones, estaré anulado.
LaRataGris