hombre de azul

Por supuesto que el hombre de azul siempre vestía de azul. Junto a su masculinidad era lo que le daba el nombre y visibilidad. Podía variar la intensidad del tono, la sombra o el olor, pero siempre, inequívocamente, las prendas eran, necesariamente, sin lugar a dudas, azules.

Camiseta marinera, con rallas horizontales, tejanos , calcetines y bambas celestes. Algún destello, azul; por supuesto, brillando en el lateral de las zapatillas.

Aunque no se veían, los calzoncillos, no desentonaban. De un suave gris, pero claro está, azulado, con tres estrellas dibujadas en las caderas, también azules; aunque eléctrico esta vez.

Cambiaba la ropa nunca su paleta de colores.

Ya nadie se sabía su nombre, ni gustos que vayan más allá del color.

«Está loco», «es un hortera»,»pues a mi me gusta», decían mil cosas del hombre azul sin decir nada de él.

LaRataGris

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

A %d blogueros les gusta esto: