Habitantes de sus ojos: Un loco, la bruja, libertarias, dragones,… Habían construido ciudades enteras que funcionaban, ¿ingenuos?, con trabajo duro, solidaridad, compromiso.
Pero, ¡ay, desgracia!: el ser humano destruye, encarcela, se autolesiona fingiendo bienestar. Le pidieron, le exigieron, que se normalizara. Que no dejase vivir a las quimeras.
-Arrancaré mis ojos- les prometió -. Seré un ciego sociabilizado, creeré la mentira.
Y, sin embargo, la verdad ha arraigado. Se revolucionan sus fantasías que no quieren morir. Sus ojos tienen un brillo especial, un algo que no podrá esconder. Contagian optimismo que tildan de pueril, pero por el que vale la pena luchar, educar en un mundo nuevo y no en la derrota de una ruina.
LaRataGris