Imaginar mejor

8 abril 2022

Al levantarse


Muerto hace tres años

15 febrero 2022

La carta llegó como un susurro en primavera, cuando la explosión de vida es capaz de ahogar cualquier tristeza.

Florecen los campos y los pájaros lo llenan todo con sus gorgojeos para el cortejo.

Puede que hace unos días cayese en el buzón, tal vez estuviese allí abandonada desde el pasado otoño, o quizás llevase allí años sin que él se diese cuenta. Sin saber por que decidió revisar que no hubiese correspondencia. Encontró propaganda del súper, spam de los testigos de Jehova y la fatídica carta.

Nos es grato comunicarle, se leía, que tras todos las pruebas realizadas su diagnóstico es el de muerte leve, felicidades.

En las siguientes dos páginas se desgranaban las pruebas aludidas. Las letras daban paso a números que no significaban nada para Benito.

Miró dos veces a quien iba dirigida la carta, siendo él el destinatario en ambas ocasiones. Miró la fecha, habían pasado dos años largos de su supuesto diagnóstico.

Entonces, pensándolo, se sintió agradecido por estos casi tres años que le había regalado la burocracia.

-Cariño- le dijo a su mujer apenas entró por la puerta- ¿No te has fijado que ya no estoy tan vital como antes?

Ella lo miró desconcertada hasta que, de repente, viendo sus ojos hundidos y la sonrisa cadavérica, lloró un día entero antes de reaccionar abrazada a su fantasma.

-Habrá que llamar a la funeraria, despedirte como te mereces.

-Tendrán muchas cosas que arreglar tras estos años de retraso. Pero espera, finjamos que todo esta bien, solo un día mas.

Volvieron a abrazarse por veinticuatro hora de no hacer nada, luego contrato los servicios fúnebres y entró por su propio pie en el ataúd.

Dejo que lo maquillaran y, al amanecer del tercer día, permitió que lo enterraran.

– Hace tres años que le estamos esperando- le dijo el sepulturero

-Es que esta gente parece vivir en la edad media, como si avisasen con paloma mensajera.

Relajado, en el mejor ataúd que se pudo pagar, consoló a su mujer que volvía a llorar. Soltó las mismas frases hechas que había malgastado en otros entierros: No somos nada, hay muchos peces en el mar, no lo veas como un castigo, esto es una oportunidad. Encontraras a alguien mejor, y sólo está última la repitió convencido, dándose cuenta de que había malgastado su vida en rectitud y trabajo.

Fue un entierro precioso, lleno de amigos recordando lo lleno de vitalidad que parecía solo dos días antes.

-Pero la vida continua- brindó Fermin, su cuñado- y no está bien perderla con los muertos.

LaRataGris


Venenos cotidianos

14 enero 2022

Quebrar


Miedo a no tener nada

29 octubre 2021

El cómic digital no sufre la crisis por falta de papel, no te lo pierdas.


Memorias de un pez cualquiera

15 diciembre 2020

La memoria de un pez octogenario se limita a los últimos segundos de vida.

-¿De qué estamos hablando?

Nada por instinto y responde preguntas como una flecha, sin apuntar.

No sabe más por viejo, no importa en la inmensidad del océano.

Tiene una revelación; el sentido de la vida se abre ante el como un libro mágico. Comprende cada uno de los engranajes que hacen girar el multiverso, descubre la fórmula que lo hará inmortal, la felicidad infinita.

Por un instante su rostro se ilumina y, un segundo después, de nuevo nada.

se pregunta «¿de qué estamos hablando?.»

La memoria son los pocos segundos que atesora y luego desaparecen arrastrados por la Corriente.

LaRataGris


Todos solos

24 julio 2020

Todos solos


Grupos de cuarentena

20 marzo 2020

Grupos de cuarentena

 

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Un lugar donde quemarse

9 enero 2020

Estaba hecha de estrellas. Brillaba con ellas y a la vez le quemaban, por eso a veces necesitaba un rincón en el que explotar. Cuando sonreía el mundo giraba deprisa a su alrededor. La luna estaba contenta mientras le escuchaba enredarse en un laberinto de palabras para decir que había amanecido, por eso a veces le pillaba el sol y ya se iba más tarde.

Su respiración era el aliento de la vida y, por ser tan importante, podía ignorar la realidad, construir su propio refugio, donde disfrutar de la soledad de una compañía.

Estaba hecha de luz y fuego, estaba hecha de amanecer e infierno. Lo era todo, incluso cuando se volvía pequeña nada.

LaRataGris


Lo que pensaba

14 junio 2019

Lo que pensaba

 

 

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